La actividad que realizamos el 2 de febrero ha resultado ser una de las favoritas de la clase de 5ºD. Tal y como la tradición francesa indica, ¡nos pusimos las botas a crêpes! Me levanté a las seis de la mañana y preparé la torre de crêpes más grande que he hecho nunca.
La celebración de la Chandeleur recuerda la presentación de Jesús en el templo. Este origen religioso se relaciona también con la importancia de las cosechas. La tradición decía que si no se hacían crêpes en este día el trigo se pudriría.
Sea como fuere, nunca habría imaginado una excusa mejor para comer crêpes.
Al llegar al cole, conocimos el origen de esta festividad, dibujamos nuestra crêpe de la suerte y escribimos en su interior la receta a partir de este ejemplo ilustrado de Chouette Box.
Tamara.