¿Qué mejor momento para hacer arte que el día que aprendemos los colores?
Hemos cortado trozos de papel, irregulares e imperfectos, para ir añadiendo garabatos de color según yo les indicaba. Tras una ronda de identificación, donde alzaban el papel coloreado al grito de «un, deux, trois» nos hemos puesto manos a la obra.
Una vez introducidos al oral, han pasado a pegar dichos fragmentos en una hoja, elaborando una composición artística.
Aprovechando tanto arte, se ha escrito el nombre de cada color debajo de cada uno de ellos, resultando composiciones únicas y llenas de color.
Ellos me han dicho «Madame, c’est l’art moderne!».
La semana pasada aprendíamos los números del 50 al 100 y lo hacíamos con nuestro ‘personaje hambriento’.
Recuperamos la expresión «J’ai faim», así como vocabulario del curso pasado para volver a activar algunos contenidos que habían quedado un poco olvidados.
Por grupos, crearon a su propio personaje: intercambiando partes del cuerpo de modelos de revistas o sustituyendo a estas por alimentos u otros objetos dando un toque más creativo.
Debían dar respuesta a la cuestión «Je peux manger» y ello lo hacían indicando el número de kilos (siempre superior a cincuenta) de los objetos que el personaje podía comer. Por ejemplo: Je peux manger quatre-vingt-dix-huit kilos de forumis.
Además, creamos un ficha personal donde inventaban un nombre, edad y lugar en el de residencia del personaje.
En una rentrée un poco tardía, hemos recordado algunas rutinas (faire l’appel, les salutations, etc.) que habían quedado un poco olvidadas tras cientos de días bajo el caluroso verano murciano.
Caras nuevas, nombres repetidos y, de vez en cuando, algún levantamiento de cejas, curioso, preguntándose qué habría dicho exactamente. Ellos lo saben: Ici, on parle français y, para eso, también necesitábamos un prénom français…
A través de esta presentación he propuesto un listado de nombres con el que se «rebautizarían» para todas nuestras clases de FLE.
El primer día que acudí a una clase de francés, en el instituto, nuestra profesora nos propuso esta idea y todos nos mostramos motivados ante la posibilidad de sonar más franceses que nunca. Aún recuerdo el mío: Sylvie.
Hoy, los niños estaban igual de sonrientes, dudando entre sus favoritos.
Tras ello, hemos proyectado un vídeo en el que apoyarnos durante el diseño de la portada de nuestro cahier.
¡Ideal para una pequeña compresión oral artística! Además de que cada palabra se apoya en la representación gráfica, gracias a nuestros gestos y a alguna ayuda extra (diapositiva 6) pueden comprender incluso el nuevo vocabulario (ejemplo: un entonnoir).
Youtube.
La última diapositiva queda preparada para la próxima sesión, a través de la cual pretendo motivarlos y hacerlos responsables del desarrollo de nuestras clases: tomando decisiones.
A ver con qué me sorprenden… de momento, tras el primer día de clase, he aprendido una cosa: necesito estudiarme equipos de fútbol franceses y sus jugadores ¡les vuelve locos!
Ma prof de Fle est un espace qui vise un meilleur apprentissage du Français comme langue étrangère à partir de vidéos. Vocabulaire, grammaire, prononciation....Le tout en s'amusant.